En marzo de 1939, cargado con carbón y con destino a Venecia, el timón de este barco funcionó mal y el Vassilios se hundió posteriormente. Este gigante de 105m descansa ahora en el lecho marino arenoso a babor; su casco, una vez lleno de carbón, ahora está vacío. Este naufragio se encuentra a una profundidad de 20 a 55 metros.