El sitio fue sometido a una gran rehabilitación en 2002, que eliminó todos los indicios de minería y lo convirtió en un sitio prístino. El proceso de minería dejó un gran agujero y un sistema de cuevas de unión, dando excelentes condiciones para todas las formas de buceo. En aguas abiertas alcanza los 55 metros y las cuevas han sido exploradas hasta los 186 metros.